“LA VIDA ES UNA OBRA DE TEATRO QUE NO PERMITE ENSAYOS”

Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO

Lic. En filosofía

Decía Sir Charles Spencer más famoso como «Charlie» Chaplin que “La vida es una obra de teatro que no permite ensayos...Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida... antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos”, cada 27 de marzo se celebra el Día Mundial del Teatro, ese arte maravilloso que hace trascender vidas, que genera héroes de las tablas y convierte iconos a los humanismos inermes por el sistema.

Fue en 1961 que el ITI (Instituto internacional del teatro) que se asienta en el mundo este día tan especial para quienes hacen una obra titánica como el de hacer teatro en un país donde la mayoría hace y se dedica en actividades donde se genera lucros pero aparta a esas acciones que generan humanidad, idealismos y progreso social de manera significante.

Pasco es tierra de teatreros, personas que luchan incansablemente contra las corrientes utilitaristas de la conversión lucrativa y desmedran la importancia de sensibilizar el alma de los niños y adolescentes para que en el futuro no haya hombres y mujeres parcos con su cultura, frugales con su identidad y apáticos con la humanidad; el teatro y la formación que provoca transforma a los seres humanos de inertes a sensitivos.

Los movimientos teatrales generados desde la UNDAC, los movimientos teatrales escolares forjados desde el festival de teatro escolar “Túpac Amaru”, “Paco Yunque” y el FESTEPI, han hecho de la región Pasco un escenario donde ha brotado de estas actividades agendas a temas de interés prioritario y de permanente lucha y exigencia que es coherente con la ciudadanía.

Un ejército de directores, guionistas, técnicos en audio, luces, actores, actrices, y activistas de diversas generaciones han hecho teatro desde su infancia , otros en su niñez y adolescencia, ; y ninguno de ellos diría “no sirvió”, al contrario elevaran loas, generaran virtudes, crearan vivencias existenciales sobre su quehacer teatral que tuvieron en algún momento de su vida, solo quien ha vivido, sufrido y haber sido feliz puede detentar que hacer teatro es sin duda una de las actividades inolvidables de la vida humana.

He visto de cerca el quehacer teatral de los actores de este arte en la tierra del frio y la nevada, he notado su estoicismo, su romanticismo icónico y su idealismo al hacer sus obras y presentarlas al público, ellos perciben que un aplauso satisface sus almas y una reflexión conseguida en el espectador llena su existencia, es por eso que quizá sea esta diligencia artística la última trinchera de la moral y la honestidad, sea el último cuartel de la moralidad y la gestión eficiente con pocos recursos pero que genera grandes satisfacciones a quienes hacen teatro y a quienes son espectadores.

Mi saludo y respeto a quienes hacen teatro en Pasco, a esos varones y mujeres que crean brillos a esta vida parca y con sus obras hacen de la vida artística y cultural una existencia urbana y rural permanente, ellos nos hacen recordar que aún hay moral en el mundo y aún hay razones por las cuales vale la pena hacer vida. ¡Que viva el teatro!