Sin la pandemia, la economía hubiese crecido 3.8%, manifestó el presidente del gremio, Erik Fischer Llanos.
El impacto negativo del Covid-19 afectará el comercio exterior y en consecuencia la economía del país, que cerraría este año con una caída promedio del Producto Bruto Interno (PBI) de -12.9%, la mayor contracción en la historia del Perú desde la guerra con Chile, estimó la Asociación de Exportadores (ADEX).

“La contracción de -12.9% sería similar a la que se registró en la época de la hiperinflación y estancamiento de 1989 cuando el PBI se contrajo -12.3%; mientras que de darse el escenario pesimista (-14.5%) sería la mayor caída en la historia del Perú sin considerar la guerra con Chile cuando se desplomó -32.9%”, puntualizó.
Añadió que la eventual caída del PBI en -12.9% representaría una pérdida de más de S/ 131 mil millones (pérdida diaria del 0.2% del PBI) por las restricciones que enfrentan las actividades productivas. “Sin la pandemia, la economía hubiese crecido 3.8%”, proyectó.
La crisis sanitaria –continuó– no solo tiene un impacto negativo en la oferta y la demanda, sino también un alto grado de incertidumbre que agudiza la crisis y que retrasaría la recuperación para fin de año, en ese sentido, es imperante reactivar la economía con políticas que generen un mayor crecimiento en términos de PBI, empleo y exportaciones, sin descuidar la salud pública.
Agregó que la debilidad institucional y la informalidad le están pasando factura al país, entorpeciendo la identificación de soluciones oportunas y suficientes, lo cual sumado a la paralización de la producción, interrupción en la cadena de abastecimiento y restricciones en las exportaciones, traen consigo menos inversión y consumo, cierre de empresas y desempleo.
Propuestas
Fischer manifestó que a fin de aportar a la reactivación de la economía, ADEX planteó varias medidas, entre ellas el lanzamiento de programas para resolver problemas de liquidez con un enfoque sectorial, intermediado por canales que alcancen a las pequeñas y medianas empresas, la ampliación de la base del cálculo del límite de créditos, entre otros.
También programas de rescate financiero que ayuden a reestructurar las deudas, revisión de los procesos de liquidación que permitan la recuperación de la empresa, el incremento de la tasa del Drawback –aplicar una tasa fija de 8% más un variable de 2% como crédito fiscal– y que el fondo del Proyecto Crecer llegue a más empresas de factoring con el objetivo de beneficiar a más mipymes y evitar romper la cadena de pagos.
“Se necesitan estímulos fiscales como el fortalecimiento del sistema de salud, el desarrollo de un sistema de seguridad sanitaria nacional y la modernización de las entidades públicas”, mencionó.
A fin de mejorar la competitividad del país se debe revisar de forma inmediata los procesos administrativos (se ganará eficiencia), crear el Sistema Nacional de la Calidad y mejorar la competitividad logística. “Construir un nuevo entorno para los negocios, digitalizar los procesos, revisar y desarrollar protocolos de seguridad y promover el comercio electrónico son otros pendientes”, enumeró.
“En estos momentos tan difíciles se debe fortalecer la articulación Estado-empresas-trabajadores, estamos haciendo frente a un enemigo externo muy dañino, la mejor forma de salir de la crisis, salvar vidas y empleos es apoyándonos los unos a los otros”, concluyó.
El dato
En el primer trimestre del año las economías de nuestros principales compradores cerraron en rojo, China (-6.8%), EE.UU. (5%), España (-5.2%), Francia (-5.3%), Italia (-5.3%) y Alemania (-2.2%).