Por Juan Diego Paredes Reategui – Director de Orienta 3.0
Las Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TICs) han tomado mayor relevancia en el contexto que vivimos actualmente. Uno de estos contextos donde se ha tenido más problemas es en la educación en todos sus niveles. La educación virtual fue o es improvisada, mal implementada entre otras cosas.
Dentro de este contexto virtual, el discente toma mayor relevancia en cuanto a la construcción de su aprendizaje, siendo este el principal agente. El docente toma un papel mediador.
Sin embargo, el docente, al ser mediador de estos aprendizajes, debe adquirir las competencias digitales y estar en constante actualización, pendiente a los cambios tecnológicos. Y es aquí donde nace el mayor reto, que el estudiante, en acompañamiento del docente, sea capaz de gestionar su propio aprendizaje.
Otro de los retos de mayor importancia que tiene el Perú es el disminuir la brecha digital que existe. Podemos notar una gran diferencia entre la capital y otras ciudades del Perú.
La motivación del estudiante toma un papel importante en el proceso de enseñanza-aprendizaje, no solo depende de este, si no de cómo se enseña, qué material estoy utilizando, cómo estoy utilizando el material y de qué otros recursos se disponen para la motivación.
Se debe romper el paradigma que la educación virtual es mala o de baja calidad. Actualmente son muchas las instituciones que apuestan por la educación virtual, existiendo plataformas donde se pueden tomar desde pequeños cursos hasta maestrías (Coursera, EDx, FutureLearn, etc.) y estas son dadas por universidades reconocidas a nivel mundial.