¿DEBE UN ALCALDE HACER CAMPAÑA MIENTRAS EJERCE EL CARGO? EL DEBATE ENTRE LA LEGALIDAD Y LA ÉTICA

La posibilidad de que un alcalde en funciones postule a otro cargo público ha generado nuevamente debate en la opinión pública. La práctica plantea serios cuestionamientos sobre la ética, la responsabilidad de gestión y el uso adecuado de los recursos del Estado.
¿Qué dice la ley?
Una autoridad electa, como un alcalde, puede postular a otro cargo durante su mandato, pero debe cumplir ciertas condiciones básicas:

No puede utilizar recursos públicos (vehículos, personal, fondos) en su campaña.
Debe respetar los plazos y reglas del proceso electoral establecidos por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE).
En algunos casos, se recomienda que solicite licencia sin goce de haber, especialmente si realiza actividades proselitistas activas.
No realizar acto proselitista durante su jornada laboral.

¿Y desde lo ético?
Desde la perspectiva ciudadana, la percepción cambia:
Descuido de funciones actuales. Se cuestiona que un alcalde desvíe su atención de la gestión municipal para concentrarse en su candidatura.
Promesas inconclusas. Postular a otro cargo antes de cumplir su periodo completo podría generar desconfianza en el electorado, al considerar que usó el cargo como “trampolín político”.
Conflicto de intereses. Existe el riesgo de aprovechar obras públicas, actividades oficiales o recursos institucionales para posicionarse políticamente, afectando la equidad del proceso electoral.

En resumen:
¿Es legal? Sí, con restricciones.
¿Es ético? Depende de cómo actúe el funcionario. Si antepone la campaña a sus obligaciones como autoridad, podría perder legitimidad.
¿Es recomendable? No siempre. La ciudadanía valora a quienes cumplen con su mandato antes de aspirar a nuevos cargos.

Este tema sigue generando opiniones divididas. Mientras algunos defienden el derecho a participar en nuevas elecciones, otros exigen mayor compromiso y responsabilidad con la función pública que se asumió.