Mamás de zonas altoandinas de Pasco, caminan tres horas para preparar los desayunos de Qali Warma

Para llegar a la institución educativa pública N° 34536, en la comunidad de Vinchos, distrito de Pallanchacra (Pasco), algunas madres tienen que cruzar una mina abandonada sobre los 4 200 metros de altura y caminar tres horas entre el ir y venir a la escuela, para preparar los nutritivos menús escolares con los alimentos que entrega el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, a través del Programa Qali Warma.

“Por mi hijo hago todo este sacrificio. Estoy feliz porque gracias a los alimentos que entrega Qali Warma, mi pequeño atiende mejor las clases”, cuenta Blanca Domínguez Gonzales, una de las diez madres de familia quien elabora los desayunos y almuerzos para los escolares de su comunidad.  

Para llegar a las seis de la mañana a la escuela pública, Blanca tiene que subir y bajar dos cerros, pasar las comunidades vecinas de Echocarpa y Pariacancha, y con ayuda de una linterna, cruza la mina abandonada de Vinchos. 

“Qali Warma no solo ayuda a la Educación, también a combatir la desnutrición infantil. Hago todo este sacrificio porque quiero ver convertido a mi hijo en un ingeniero civil”, apuntó la señora Domínguez.

En el distrito de Pallanchacra, Qali Warma atiende a 314 escolares de diecinueve  instituciones educativas públicas.