Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO
Lic. En Filosofía y CCSS
El gobernador regional debe ser sincero, llano y franco; y decir “quiero ayuda” porque no puedo solo, bloqueando a tu vice gobernador, manteniendo funcionarios del sector salud que no están a la altura del reto pandémico y sectorizando solo a Oxapampa, descuidando a las dos provincias en verdad debe ser sincero y decir “ayúdenme”, pero noto que no desea pedir auxilio, la petulancia lo vence, la vanidad le gana, la arrogancia lo vuelve ciego.
La sinceridad es vital en tiempos de pandemia, nos ayuda a cada ciudadano saber las demarcaciones de su gobernante, pero nuestros políticos están acostumbrados a mostrarnos canceles, a decirnos que todo está bien, que está vigilado, que estamos listos, que nada pasara, sin embargo, la cruel realidad es contraria a esos mensajes de calma, de bienestar, de falsa armadura que nos enrostran cada día a través de sus medios de prensa directos e indirectos.
No son tiempos normales, son tiempos de pandemia y la sinceridad es clave para que la población sea consciente de lo que se está sufriendo.
Sinceridad en los gobiernos provinciales y distritales, solo se limitaron hacerse famoso entregando víveres, quedando bien ante los proletarios hambrientos de despensas, dando víveres del dinero del aporte tributario de todos, no es su dinero, no digan “el alcalde” da, dona, entrega, gestiona, eso es falso, mentira y ficción; como son en su mayoría de comunicados donde dan falsa expectativa, y otras drogas comunicacionales.
Sinceridad en los funcionarios de la salud, decirnos la cruel verdad, un hospital reinaugurado sin equipamiento tecnológico médico y sin especialistas que afrontar con éxito esta pandemia, sinceridad en decir que el hospital covid es solo para la fotografía para que el gobernante regional quede bien mientras que la Contraloría informa que no tiene las condiciones, sinceridad señores, fingimientos a estas alturas no vale, no es bueno.
Sinceridad hacia nuestros hijos diciendo las cosas como son acorde a su edad, sinceridad a los adolescentes para que en ellos surja la creatividad de adaptarse, sinceridad con los abuelos y protegerlos más que nunca, sinceridad en tu propio razonamiento, los tiempos que vendrán serán críticos, desde la base económica hasta la estructura social, demandara de nosotros sobrevivir con nuestras habilidades y capacidades para hacerle frente a lo que se viene , la situación crítica no es ahora es después cuando afrontaremos como individuos y sociedad los feroces nuevos tiempos.
Hemos visto el límite de capacidad de administración de la crisis a las autoridades, nadie está a la altura de la necesidad, ninguno lo estaría, nadie sabía que iba gobernar una región o un municipio en una pandemia, la mayoría se alistaron para sisear, adueñarse y empoderarse financieramente a costa del presupuesto regional, provincial y local, se jodieron, ahora tendrán que servir, arriesgarse al contagio, y encima no ganar más que el aprecio de la gente, claro eso no es monetario es emocional y eso no basta para algunos cacos que llegaron al poder.
Ya hemos visto el techo, la frontera de su administración de nuestras autoridades, es deber ahora tú mismo cuidarte, proteger a los tuyos, porque colapsara el sistema de salud, y no habrá respirador que te salve, la economía agravara y si no racionas tus alimentos y tu billetera no llegaras a fin de año con sustento económico para afrontar la crisis.
Como es la ley de la naturaleza siempre los débiles fallecen a inicios, luego los fuertes, y sobreviven los que fueron hábiles y tuvieron la capacidad de dar paso a paso decisiones que permiten su sobrevivencia, porque aquí ya es eso, sobrevivir, el vivir ya paso, el morir esta adelante, depende de ti dar el pie rumbo a su encuentro cercano o lejano.