BANDO DE SU MAJESTAD “EL FILOSOFO”

A todos los cultileidos de la tierra del frio y la nevada, invoco a que en estos días de carnaval, entreguen más que el cerebro, la estupidez, más que el intelecto, la ignorancia; ya que el festejo es la escapada a la sabiduría y la fiesta es una licencia a la inteligencia.

CONSIDERANDO:
Qué, debemos dar tiempo al agasajo y dejar de alimentarnos de la sabia colectiva, para perdernos en los linderos de la cojudes que genera el libar, para derrocharnos en las banalidades que crea el aguardiente y la cerveza, pero vaya, un día de ignorancia no lastimara todo un año de inteligencia.
Qué, debiendo bajar a lo chabacano y confundirnos con ellos, es hito siempre recordar que hay seres como nosotros que disfrutan de la vida como si fuera el último de sus días, y es cierto, pero es que ellos no saben que la eternidad se logra con la abstracción y no con el concreto de sus obras.
Qué, como sabios y mortales que somos, desbandémonos una vez al año que al final no hace daño, agarremos la mano del prójimo y bailemos lo que vale la pena, es decir un huayno Cerreño y un pasacalle pasqueño, pero eso sí, de lo que no debemos perdernos es de entonar una muliza que de hecho es lo único que sintoniza con nuestro loar.
Por lo tanto:

DECRETO
1. Dejar los libros por estos días y envenenarse de la inopia que contagian las masas; mezclarnos de la sinrazón y evacuar ramplonerías de nuestra boca, que en el fondo será bueno para un relax espiritual.
2. Perdernos en el vacío de la inquietud que produce el sexo opuesto al exponer su sensualidad en estos días festivos donde tirios y troyanos se confunden y pierden el recato, la castidad y también la virginidad.
3. Relájense el buen castellano, y piérdanse los buenos modales, dejen el respeto y la caballerosidad, que es carnavales donde no hay edad para el amor y hay licencia para pecar, para traspasar lo prohibido y amar sin límites en nombre de la pasión.
4. Canten sin parar, entonen con la boca y los labios, liben sin parar, succionen hasta el fondo del Líbano sonrosado que el placer se genera en el paladar y la amígdala la motiva, pero el cerebro la sanciona.
5. Enamoren aristos con perlas y diamantes eruditos; persuadan con favores del entendimiento y lleven al techo de la alegría con cognición; seamos felices de otra forma, aunque trivial y pasajera, solo el gozo queda.
Dado en la casa de la pobreza en dinero, pero opulencia en lo ignoto en los días del carnaval en el mes de marzo del año 2015
Atentamente
EL HOMBRE DEL VITRUVIO