Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO
Lic. En filosofía
Tenemos un buen presidente técnico, pero un pésimo político, el gobierno actual está lleno de regulares tecnócratas pero malos operadores políticos, los ministros actuales en su mayoría son buenos para responder a los técnicos de los gobiernos regionales y locales pero les falta el matiz de la persuasión política, al collage de mezcla popular, les falta entender que en el Perú no basta explicar técnicamente los problemas y sus soluciones sino que es necesario “fumar” el puro de la concordancia, “escuchar” las voces todas del ande, la amazonia y la costa, tenemos tecnócratas cuyo perfil es frio y apático, digno de máquinas, de ordenadores que son formales, obedecen a protocolos cuando hasta ahora no se han dado cuenta que gobernar no es armar “sistemas” es dialogar con todas las partes y escuchar a todas las voces.
La huelga del SUTEP, no solo se trata de aumento de sueldo sino de respeto y dignidad a todas las voces, saben todos que el SUTEP tiene dos liderazgos, uno centralista, acaparador y condicionante que es el “CEN nacional” y el otro que fue producto por la frustración de los maestros de las regiones del país de tener un liderazgo “ que vende huelgas”, “que negocia las luchas” y que vive, goza y administra una “Derrama Magisterial” que es la fuente de la riqueza de esos dirigentes ; a esa situación un ministerio no puede ser miope ni misántropo a esa realidad nacional del magisterio peruano.
La fotografía del premier, la ministra, y algunos jefes políticos regionales en la cual informa “los acuerdos” que llegaron después de analizar el contexto, es de hecho una falta de visión política, una carencia de estrategia en negociación y nos muestra “que no pasa nada” con su forma de conducir un conflicto, ¿ quiénes están haciendo la huelga?, ¿los gobernadores o los maestros?, ¿ quiénes tienen un pliego de reclamos?, ¿los gobernadores o los profesores?, si yo veo que hay huelga, converso, dialogo, tertulio ¿con los huelguistas o con los gobernadores? Allí nada más se nota la falta de caminar país, de adentrarse hacia el maculo nacional.
Primer error político es cuando la ministra llama a uno que otro gobernador para conversar temas que le compete dialogar con los maestros.
Segundo error táctico político: la ministra conversa con un liderazgo sindical magisterial que solo tiene representación cuasi limeña pero que ya hace 10 años no representa a las regiones.
Tercer error social: es no dialogar con las peanas, con el pueblo magisterial del Perú de adentro, del ande, de la selva y de la costa.
Son errores de negociación tan infantiles que nos hace notar a simple vista que tenemos en el ministerio personas que no conocen el país educativo, que solo emanan directivas sin tener pleno saber de lo heterogéneo de la realidad nacional.
Por eso el error de fiestas patrias colocando la imagen de Bolívar en vez de San Martin, no fue paralogismo sino muestra de ignorancia, el oficio enviado a un gobernador regional en la cual el nombre del año pertenece al anterior es fruto de una falta de lectura actual de historia básica en el país de quienes dirigen las políticas educativas de la nación.
La huelga magisterial seguirá y no solo bastara aumentarle el salario paporretero al maestro sino aparte de ello es nombrar Ministros, vice ministros, directores y funcionarios que “dejen huella” en el ministerio pero no por ser ignorantes de la realidad nacional y ser apáticos con la clase magisterial regional, sino por adentrarse en las aulas de la selva, del ande y de la costa , dialogar, y comprender que la educación es un problema complejo pero que si la atendemos con todos y para todos construiremos un mejor futuro nacional.
