Ejecutivo alcanza acuerdos con mayoría de mineros informales

PROTESTA. En Puno, los mineros informales realizaron concentraciones de gran magnitud. Acuerdo calmó la situación.

Sin embargo, persisten demandas de algunos sectores de informales, principalmente de la zona de Madre de Dios. PCM mantiene diálogo permanente.
Mientras el gobierno firmó diferentes acuerdos con dirigentes de mineros informales de las regiones de Arequipa, Apurímac, Ayacucho, La Libertad y Cajamarca el 25 de marzo, y el 27 de marzo para la región de Puno, las negociaciones siguen en la Presidencia de Consejo de Ministros (PCM) para llegar a un acuerdo con representantes de Madre de Dios. Esto mientras el Ejército reforzaba la vigilancia en zonas afectadas, como las de Ocoña, Atica, Chala, Arequipa, Puerto Maldonado y Puno. El jueves, por ejemplo, el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, Gral. Leonel Cabrera Pino, encabezó una gira de inspección en la provincia de Caylloma (Arequipa) y en Juliaca (Puno) a las tropas de apoyo asignadas para resguardar el orden en el marco de las protestas de los mineros. En el aeropuerto de Juliaca, pasó revista al contingente de las fuerzas del Ejército en la zona, que junto a un grupo de efectivos policiales ascienden a 800 efectivos. En la plaza Zarumilla de esta ciudad puneña, frente al cuartel del grupo de artillería de campaña, se encontraban miles de mineros informales, cuyos representantes rechazaban el acuerdo firmado en Lima. Ellos exhortaban al gobierno a escuchar sus demandas. "No convencen porque nada de lo que hemos enviado de nuestra propuesta está en el acta. Seguimos en pie de lucha", expresó Elio Rosell Laura, presidente del comité de lucha de la región Puno. Pese a ello, la situación parecía retornar a la normalidad, especialmente en los lugares dónde en días anteriores se concentraron los 11 mil mineros en huelga, tomando las carreteras de Juliaca con salida a Arequipa, Cusco, Puno y Huancané. De ese modo, la Panamericana Sur empezó a despejarse luego de haber sido bloqueada desde el 22 de marzo.


EN PROCESO
En Lima, Daniel Urresti, alto comisionado de Asuntos de Formalización de la Minería, Interdicción de la Minería Ilegal y Remediación Ambiental de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), dijo sentirse satisfecho tras la firma de varios acuerdos con los diferentes grupos de mineros informales que llegaron a Lima esta semana. "Se estima que serán 70 mil el número de trabajadores que se formalizarán, dentro del plazo límite fi jado al 19 de abril", expresó. Urresti explicó que hay un plazo de 120 días para que observaciones que se han manejadomen la formalización entren en revisión y ver cuáles se podrían modifi car. La etapa de saneamiento vendría enseguida, con metas mensuales que dejarán "fuera del proceso a los que no las cumplan". La principal dificultad – dijo– consiste en establecer los contratos de concesiones, porque "es un asunto de propiedad privada" entre el dueño de la tierra, el concesionario y el minero informal que explota el recurso. Según Urresti, 20 mil mineros lograron firmar contratos, pero aún no se formalizan porque la nueva ley establece que pueden continuar trabajando mientras siguen en proceso de formalización, lo que no les incitaba a cumplir los plazos. Hasta al cierre de esta edición, el Ejecutivo alcanzó un acuerdo con uno de los grupos de mineros de Madre de Dios. Urresti adelantó que el diálogo con los otros informales de la zona continuará.

Alcanzarán beneficios
● Según el Alto Comisionado de Asuntos de Formalización de la Minería Ilegal, Daniel Urresti, los formalizados alcanzarán beneficios colectivos.
● "En la Rinconada hay 450 huecos, pero se ha convertido en una ciudad de más de 25.000 obreros que trabajan en distintos huecos. Esos trabajadores se beneficiarán de seguros y más medidas de seguridad",afirmó.
● Urresti resaltó también la necesidad de diferenciar lo que es minería informal y la ilegal. Recordó que la primera está compuesta de "trabajadores pobres", pero los ilegales son los que vienen "destruyendo el medio ambiente de manera irremediable", por lo cual el gobierno seguirá realizando operativos de interdicción.
(La república)