Invitada especial: Esperanza Choi – Pastora de Colombia
En esta oportunidad las hermanas de la Misión Buenas Nuevas – Perú y Bolivia, podían tener la gracia de participar en la comunión de damas en esta primera sesión, teniendo como invitada especial a la Misionera Esperanza Choi, quien ministra en el país de Colombia.
El programa iniciaba con los testimonios de las hermanas de diferentes sedes y la presentación musical de la maestra de Sión de la Escuela de música Sesori, las hermanas en sus testimonios podían expresar el corazón fortalecido que Dios les permite a pesar de la situación en la que estamos viviendo en estos tiempos.
La misionera Esperanza Choi ministra de la iglesia en Colombia, fue la invitada especial para compartir el día de hoy en esta primera sesión de la comunión de damas, ella tocaba un punto muy importante sobre la conexión y la interacción de nuestro corazón con otros corazones.
La misionera nos compartía el libro de San Juan 21: 1 – 18
Por medio del testimonio la misionera despertaba los corazónes de las más de 150 participantes y nos reflejaba porque muchas veces por el orgullo no queremos enfrentarnos a nuestros propios miedos. Por esta cita bíblica podíamos reflejarnos con el corazón de Pedro que tenía para Jesucristo, cuando le preguntaba a Pedro si lo amaba; ¿de igual manera Dios nos pregunta si nosotros le amamos? en nuestro corazón A veces pensamos que no hay amor
para Dios pero ese pensamiento es un pensamiento equivocado porque Dios nos dice en su palabra que él ha puesto amor para Dios en nuestros corazones.
Así como Pedro era dominado por su pensamiento, nosotras también muchas veces somos dominadas por ese pensamiento equivocado y eso nos hace apartar del camino que Dios nos quiere hacer disfrutar. De esa manera nuestro corazón Muchas veces no se quiere desprender de nuestro pensamiento negativo, al igual que Pedro, creemos que ese es nuestro propio corazón y no reconocemos que ese corazón de desamor es manejado y manipulado por satanás.
Satanás muchas veces nos empuja a buscar corazones equivocados para ocultar nuestro verdadero corazón, yaqué Dios había puesto amor para él en nosotros. Ese corazón equivocado, sólo quiere que nos mostremos bien ante nuestro padre Dios, pero sin embargo el padre espera de nosotros nuestro verdadero corazón, equivocadamente nosotros creemos que podemos mostrar un corazón puro, bueno y verdadero. Al igual que el hijo pródigo nosotros tenemos el corazón muchas veces enaltecido, pero llega el momento cuando Dios espera solamente, nuestro corazón arrepentido, donde sólo podemos mostrar lo que hay en nosotros, sin esforzarnos para hacer las cosas bien. Dios sabe exactamente cuál es el corazón que está en nosotros.
Por eso Dios nos dice que no intentemos hacer algo bien para agradar a Dios. Generalmente por nuestro pensamiento y orgullo no podemos disfrutar de las cosas que Dios nos ofrece.
La misionera Esperanza nos hablaba sobre el propósito que tenía Dios al darnos la salvación: ella nos decía que el propósito que tenía Dios, era para que nosotros disfrutemos de todo lo que Dios había hecho para nosotros a través de la iglesia y del siervo; donde podemos encontrar ese amor verdadero que Dios tiene para nuestra vida. Pero fácilmente satanás no quiere que aprovechemos las cosas que nuestro padre Dios tiene para sus hijos.
También hacía referencia un versículo bíblico en Romanos 8:28
Más que vencedores
28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.
Dios nos dice: que nosotros amamos a Dios y Él nos llamó. Por medio de la iglesia, los siervos y los hermanos, nosotros podemos conocer el amor de Dios. No necesitamos ser mejor que otras personas, porque Dios así nos llamó y nos amó, así nos perdonó siendo tal cual somos, ´Jesucristo nos dio la salvación por medio de su sacrificio.
El corazón de la misionera Esperanza nos decía: que nosotros somos los últimos agentes de virus de la felicidad. Desde que nosotros tenemos el evangelio, recibimos la salvación Dios; nos dice: que podemos expresar la felicidad.
En esta primera sesión la misionera Esperanza Choi, por medio de su testimonio y la palabra de Dios nos compartía el corazón que tiene Dios para nuestra vida, la esperanza implantada en nuestro corazón de alegría desde que recibimos la salvación.
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