DIAS QUIMÉRICOS

Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO

Lic. En filosofía

Nicolás Maquiavelo, ese procaz pensador del renacimiento, decía en su ya famosa frase “el fin justifica los medios” algo que ilustra los días que apreciamos, lo importante es el fin, la meta, y el colofón, no incumbe ni atañe los modos, las estrategias, las tácticas y las técnicas, lo vital es llegar a obtener, a lograr, lo que importa es el resultado a pesar de que el proceso sea deshonesto, impuro, sisero, engañador o simple pantomima.

Vivimos días falsos, semanas armadas, meses calcados, la sociedad es engañada constantemente y en ocasiones a decir de Noam C. la misma sociedad ni siquiera es consciente de ese artificio, hacemos creer que el logro ya es tácito cuando recién es artificial, convencemos con la palabra sofista y no con la demostración cartesiana, la intuición se usa como arma para seducir y no se ampara en las demostraciones del empirismo peor aún con las fuentes del racionalismo.

Engañan las balanzas, estafan los académicos, timan los políticos, simulan los medios de prensa, por veces percibo que estamos en una obra de teatro donde como dice Leonardo Di Caprio “el negocio es fingir”, la lealtad tiene su validez en razón a la utilidad, la honestidad esta certificada por el monto en dinero, salario, bono, o renta que te genera la acción de serlo, la moral está determinado por el mercado, la ética sancionada por la norma moral solo es pecado y como no es delito, se orinan en ella.

Hoy el ciudadano se deja usar libre y conscientemente, más aun si ese uso le trae utilidad, al final “negocios son negocios”, importa el ingreso para sostener el pan en la casa en estos tiempos donde hay escasa actividad minera, vale todo, así sea pequeño o mediano la manera de ganarse la vida.

Por eso el transportista quiere subir el pasaje, el comerciante el precio de todo, el restaurant mantiene el precio pero quita a la sopa carne y al segundo la presa grande, por eso sube la pensión pero no el sueldo, crece las tarifas pero se reduce el ingreso, y no somos leales con nuestro precio, disfrazamos el aumento usando la compasión de vivir necesitados, y si lo estamos , pero en un mundo donde según Darwin ganan los que se adaptan, los pulcros salen perdiendo, los leales son explotados y los probos son descartados.

Decía este sesudo cantante Charlie García “si te pones la camiseta deberías saber por qué” a veces es mejor no ponerse muy al fondo porque después sabrás que nada es seguro ni rotundo, todo tiene repuesto, y allí se incluye también al varón y a la mujer, todo tiene reemplazo, en esta época de dialécticas a decir de Hegel, respondía Einstein que nada es fijo y todo es relativo.

Por eso mejor les recuerdo a ese magistral filósofo Parménides cuando sostenía que “lo que es es y lo que no es, no es”, lo que es puro que siga siendo puro, lo que es corrupto seguirá siéndolo así, perdemos el tiempo intentando cambiar a la gente porque como sentencia Nietzsche “la esperanza es el peor de los males”, y lo afirma Emil Cioran ese extraordinario filosofo realista, cuando sustenta que la sociedad no me gusta pero como es la única que hay es la que debemos soportar .