FERNANDO DE SZYSZLO, EL GRAN PINTOR

Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO

Lic. En filosofía

Fernando de Szyszlo ha muerto y junto a él también su esposa, amiga, compañera y amante; la casualidad del asunto fenomenológico ha hecho converger a la muerte a ambos seres que se amaban, no hay mejor muerte junto a quien amas y más aún si se trata de estar ya seniles, además el gran pintor del Perú, ya decía en su libro LA VIDA SIN DUEÑO que si su esposa muriera primero, él no podría aguantar solo la existencia y no tardaría por pena o aislamiento seguirla inmediatamente.

92 años no se si ha sido suficiente para decir basta a la vida y darle la bienvenida a la muerte, ¿bastara 92 años?, en el caso de Fernando quizá, porque vivió como se debe, amó, odió, renegó, fue feliz, la tristeza lo desangro, gano, perdió, tubo a la mejor mujer de su vida que fue su primera consorte y también tubo a la otra mujer su segunda desposada que le daba felicidad ( juntos expiraron); libo con Arguedas como también con Bondy, tertulio con Octavio Paz y a la vez convergió y fue amigo de Mario Vargas Llosa.

Fernando conoció y se enfrentó a las dictaduras que gobernaron el país desde 1930 hasta las de los noventa, halago y puso bandera a la democracia y sin duda admiro su postura política siendo artista, yo que conozco a muchos amigos y amigas del arte sea musical, teatral, literario, dancístico que al momento de tomar posturas políticas prefieren el silencio o la complicidad a cambio de vender su arte, u otros muy nihilistas que prefieren hacer arte con solo política teórica, Fernando asumió posturas y frente político, eso quizá forjo obtener muchos enemigos, y de ganancia muchos detractores, pero también le colmo de muchos y fieles aliados, el arte sea en cualesquiera de sus expresiones no debe estar aislado de la política porque dicen los puritanos del arte es la política que corrompe al arte, pero es el arte quien la puede salvar y resguardar porque en el arte están los idealismos puros, blancos, e inmaculados que requiere la política.

Vaya que Fernando si vivió y bien , con el amor de su vida exploro Europa, los EEUU y el oriente, aventureros ellos con solo para la comida en el bolsillo, y con el segundo amor que le dio felicidad vivió en el Perú y renuncio a la vanguardia ideológica de los países cultos para venir a vivir en un país de mayoría inculta, prefirió asumir ese reto que todo maestro y maestra toma cuando decide por esa loca vocación ,transformar a un país ignaro e indocto en uno intelectual y sabio , vaya que siempre se pierde relativamente en esa lucha.

Se fue Fernando, y vaya que 92 años si pesa y da autoridad para hablar y dejar paradigmas, no debe dudarse en darle un nombre a algún lugar histórico cultural del País, porque estando vivo cierta clase envidiosa y celosa le negó, ahora de muerto quizás esos fariseos hipócritas de la cultura hagan silencio, y el país cumpla con la memoria del gran pintor que nos dejó uno de sus mejores cuadros a los niños y jóvenes : decir y luchar por la verdad siempre será mejor para el país.