DANZANDO TAMBIEN ESTAMOS EDUCANDO

Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO
Lic. en filosofía y CSS

Si hay algo que la tenemos clara luego de vivir de cerca las danzas magisteriales 2019 es que ya la ciudad más alta del mundo, se merece tener un coliseo de gran capacidad, un súper aforo, un magno polideportivo cultural en serio que pueda recepcionar y servir a miles de personas que van en un certamen como es de la magnitud del concurso de danzas magisteriales, u otros eventos sean deportivos, sociales etc.

¿porque no tenemos un coliseo de verdad en la ciudad minera?, ¿qué excusa nos gana siempre?, ¿porque todas las gestiones sean de carácter provincial y regional no lo hicieron?, ¿ falto dinero?, ¿ falto visión?, cuando se postulan para obtener el sillón provincial está en la mayoría de las promesas de los candidatos, pero llegado al gobierno solo nos presentan excusas y barajos de que no se puede hacer por razones técnicas, nuevamente gana la fanfarria burocrática y la incapacidad de gestión de nuestros gobiernos que han pasado.

Alguna vez a un alcalde le pregunte porque no se podía hacer una obra de infraestructura de esa magnitud y me dijo que no se podría por la ley de traslado que tiene la ciudad y que no permite realizar inversiones millonarias en la ciudad, eso es una respuesta técnica de porque no se podría hacer.

En otra ocasión le pregunte a otro alcalde y me explico que no hay terreno donde construir, ¿dónde podemos construir?, ¿en qué terreno? Y bueno tal vez quizás su respuesta sea más comprensible, ¿en qué terreno lo haríamos?, ¿patarcocha? o ¿chaquicocha? Y si fuese así el estudio de suelo da negativo para construir tamaña obra.

Pregunte en otro a otro alcalde y me manifestó que las políticas de aprobación de obras no priorizan coliseos, o espacios de recreación social, ya que primero se debe atender las necesidades básicas como saneamiento básico legal, y después quizás, quizás se pueda obtener aprobación al expediente de un coliseo, primero la salud, la seguridad y después la inversión en distracción sociales, imagínense.

Hasta ahora he visitado a casi todos los distritos de la región y una gran mayoría tiene súper coliseos, y la capital minera del mundo tiene un “mini coliseo”, un “mini estadio”, “un mini terminal terrestre”, “una mini biblioteca”, “una mini plaza principal”, una mínima visión tiene sus autoridades y líderes sociales que hasta ahora no tenemos agua potable, ni tenemos hospital en funcionamiento, no tenemos parques, no tenemos coliseo, nuestra ambición también es “mini”.

Por eso somos pueblo conformista, quejoso y no hacendoso, primero hacemos la obra que no sirve y no construimos obras que, si ayudarían a vivir mejor en nuestro pueblo, somos conformistas que cuando trasladaron la capital de la región a otro lugar no hicimos nada y aceptamos ese destino, como muchas imposiciones que nos hicieron en el pasado y el presente de parte de los gobiernos que han regido al país.

Gano la Institución cuya barra característica es “…orgullo del centro del Perú” le dio el trucay de ganador el colegio organizador que lleva el nombre del vate cuyo segundo nombre es Abraham y segundo apellido es Mendoza, el próximo año las “marianas” organizaran la versión 2020 y los maestros ensayaran, invertirán tiempo y dinero para sobresalir en este certamen que hace

solido nuestra identidad cultural, todos y todas ellos mandaran hacer sus mejores disfraces, presentaran sus mejores galas, y sin embargo volverán al mismo lugar donde para entrar se aprietan y para salir se agrietan, ira mucha gente a ver y ya no habrá entradas porque el recinto del mini coliseo no da para más.

Y así seguirá nuestro destino, pasará más años y seguirá lo mismo o peor, y nadie quizás como decisión política construya un coliseo, uno grande y suficiente, como lo merecen los habitantes de la tierra de “machos”, pero de machos y machas no tenemos nada, solo conformarnos y resignarnos a nuestro incierto destino.