Comunicado
La Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) respeta a los pueblos indígenas y amazónicos, que desempeñan un papel fundamental en la ordenación del medio ambiente, para promover el desarrollo alternativo y sostenible. También el derecho a su propio idioma, su cultura, religión y el territorio que, tradicionalmente, habitan ancestralmente.
A la fecha, Devida atiende a 185 comunidades nativas en las diferentes zonas de competencia de la institución y ha intervenido en 9,273 hectáreas de cultivos alternativos, que integran 10,436 familias de las etinas Asháninka, Matsiguenga, Nomatsiguenga, Cacataibo, Yanesha y Ticuna, en actividades productivas de cacao, café, piscicultura, entre otros.
En ese marco, en el ámbito del Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), se cuentan con siete convenios de entendimiento con la Organización de Comunidades Asháninkas de Mazamari (OCAM), la Central Asháninka del Río Ene (CARE), la Central Asháninka Río Tambo (CART), la Federación de Comunidades Asháninka de Río Ene (FARE), la Organización de Comunidades Asháninka de Río Ene Pangoa (Ocarep), la Asociación Unión Asháninka y Nomatsiguenga del Valle de Pangoa (Kanuja) y la Organización Asháninkas y Machiguengas del Río Apurímac (OARA).
Asimismo, este año se inició la implementación de la actividad productiva de café, mediante la Municipalidad Provincial de Chanchamayo con una inversión de un millón de soles. Los distritos San Ramón, Vitoc, Chanchamayo y Perené son los beneficiarios, en este último se encuentra ubicada la comunidad nativa Shankivironi.
Por ello, rechazamos la intromisión, invasión, abuso y presencia de organizaciones criminales relacionadas al tráfico ilícito de drogas y de tierras en dichos territorios. Lamentamos el asesinato de la defensora ambiental Estela Casanto Mauricio, de la comunidad nativa Shankivironi en el valle del Perené en Chanchamayo (Junín).
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